Cristo, La Primera Piedra

El Descendimiento, Caravaggio. 1602-1604
El Descendimiento, Caravaggio. 1602-1604

LA OBRA DEL ARTISTA

El Descendimiento, Caravaggio. 1602-1604

 

Destaca en primer término Nicodemo, que vuelve su cara al espectador y el apóstol Juan, ambos portando el cuerpo de Cristo. Juan deposita el cuerpo de Jesús sobre la piedra donde será embalsamado. La mano derecha de Cristo apunta a la Piedra. Su mano apenas roza la losa donde debe ser lavado, ungido y perfumado, lo cual constituye una alusión al propio cuerpo (de doctrina) del Cristo (Chokmah), como piedra angular y fundamento del trabajo esotérico. El ojo del espectador va descendiendo de la superficie a la oscuridad del sepulcro, a través de las tres Marías del cristianismo, son: María Cleofás prima de María, la Madre de Jesús, María Magdalena y María la madre de Jesús. No es un momento de transfiguración (de gloria), sino de duelo. El descenso al sepulcro (a trabajar con el subconsciente), se debe a las consecuencias karmicas del pecado, por haber profanado el santuario del amor, representado por nuestra Madre Divina. Con la violación del los mandamientos 6° y 9° de la ley de Dios.

Virgo, signo de la virgen celestial.
Virgo, signo de la virgen celestial.

EL SIGNO ASTROLOGICO DE VIRGO

 

Un principio hermético dice: “Cuando el hijo fiel ama a su madre (la virgen pura), ella lo lleva por el camino recto (enseñandole la sabiduría oculta), cuando el hijo infiel se olvida de su madre, se extravía y cae en el error”. La inmensa mayoría de los seres humanos somos esos hijos infieles, que profanamos a la mujer (con la fornicación) y despreciamos la sabiduría oculta. Jesús el hijo fiel, agradecido con la mujer dijo al fariseo (que culpa a la mujer): "...no me ofreciste agua para lavarme el polvo de los pies, pero ella los lavó con sus lágrimas y los secó con sus cabellos". (Aludiendo a su propia mujer, a nuestra propia mujer). Te digo que sus pecados han sido perdonados, por eso ella me demostró tanto amor (entrega a la causa); pero una persona (que profana el santuario del amor) a quien se le perdona poco, demuestra poco amor (a la mujer). Entonces Jesús le dijo a la mujer: «Tus pecados son perdonados».  El amor debe traducirse en hechos, no bastan las bonitas palabras o las nobles intenciones  “de gentes con buenas intenciones está empedrado el camino al infierno”.

“[Juan el Bautista] dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías”. (Juan 1:23). Juan el Bautista, nos invita a entrar en el santuario maravilloso del amor, por medio del Bautismo (un pacto de magia sexual) con la mujer sacerdotiza, la virgen pura del signo astrológico de Virgo, para ingresar al vientre zodiacal de nuestra Madre Divina, la sabiduría pura, con la que podremos alcanzar el  nacimiento segundo. Jesús lo enseña en el evangelio y el artista lo enfatiza en su obra; con el dedo Jesús señala "La piedra que desecharon los edificadores, ha venido a convertirse en la piedra angular", (la sexualidad sagrada).

El mensajero, simbolo del Mercurio.
El mensajero, simbolo del Mercurio.

 

El PLANETA MERCURIO

 (Dos formas de enseñar)

 

Jesus dijo a Nicodemo: "De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios". El planeta regente del signo Virgo es mercurio, que rige sobre la mente y la razón, pero también la ciencia, la sabiduría cósmica. Nos encontramos entonces en tal signo, ante dos formas de entregar la enseñanza. La de Jesús y la de Nicodemo, este último es el enfoque ortodoxo tradicionalista, que aguarda la venida de un salvador fuera de nosotros mismos. Jesús en cambio, viene con un nuevo enfoque, el de la libertad interior, la "libertad en espíritu", la libertad del cautiverio en pecado, ese es el enfoque gnóstico de Jesús. El artista lo ilustra en su obra, Nicodemo viendo hacía fuera, atrapado en el mundo de los sentidos a través del deseo que surge de la fornicación, juzgando por consecuencia las acciones y conductas de los demás.

 

Jesús lo exhorta en su encuentro, a replantear su punto de vista espiritual, a trabajar internamente con sus propios defectos psicologicos y a fundamentarse en la Piedra (la sexualidad sagrada), para poder comprender e interpretar las escrituras con mayor pureza; ya que sin esta experiencia, la Luz de la Madre Divina Kundalini, “no se puede entender”, si no se dispone, como los apóstoles de Jesús a abrir sus mentes y su corazón para recibir el Don del espiritu Santo, para entender la vivencia esotérica, "iniciatica" de Jesús, a través de los arcanos del Tarot.

 

La "innovación" de liberación interior manifestada por Cristo, sorprendió a los eruditos de su tiempo de la misma forma que el V.M. Samael sorprende a los eruditos actules. El gnosticismo más que una doctrina teórica, es un compromiso de colaboración con el Cristo Cósmico, para purificar el Santuario del Amor. Tal es el sentido de la frase: "De cierto de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu (de libertad interior), no puede entrar en el reino de Dios".

Juan pon la Cabeza en la Piedra.
Juan pon la Cabeza en la Piedra.

"Nicodemo, emblema de lo viejo". De la decadencia en sí que no proviene del tiempo, sino de las consecuencias karmicas del pecado, como resultado de Satán, el ego, el egoísmo, que engaña a la humanidad. Solo la verdad (que Jesús apunta con su mano), podrá libertar nuestra alma del engaño y del pecado, santificando el Corazón. En la iniciación venusta se purifica el santurio.  La necesidad es imperativa por lo tanto, de que la humanidad conozca la doctrina de Pedro y la doctrina de Juan (a través del Avatara de Acuario)." Y Jesús lo dijo: "Madre e ahí a tu hijo (Chokmah, la sabiduría oculta), hijo e ahí a tu Madre (La mujer) y desde aquel momento Juan (el Avatara) la recibio en su casa (la enseñanza de Acuario).

María Magdalena
María Magdalena

Es la piedra, la sexualidad sagrada, la doctrina de Pedro, el viviente simbolo del matrimonio gnóstico, donde la mujer virgen (casta), ayuda al casto varón a levantarse espiritualmente a través de la divina madre kundalini y la gratitud del varón corresponde el sacrificio de su mujer. Para que unidos solidamente como una piedra y mediante los tres factores de la revolución de la consciencia, laven todo su karma y logren encarnar a venus la estrella del amor, el lucero de la mañana. Recordemos que Juan reposa su cabeza en el corazón de Jesús, para indicarnos que el amor se alimenta con amor.

Nuestra Madre Divina es la clave, para equilibrar a Juan con Nicodemo.
Nuestra Madre Divina es la clave, para equilibrar a Juan con Nicodemo.

Devi Kundalini y la mujer son la clave para lograr el equilibrio de nuestro Ser con el saber. Nacer del agua y del fuego. De aquí la importancia de que el hombre y la mujer en el matrimonio, abandonen la tendencia a sentirse victimas del otro, para entrar de lleno al trabajo psicológico de la disolución del Yo, a dejar de ver el error afuera y en instrospección auto-descubrir los yoes que originan los problemas, para posterioremente, disolverlos con el auxilio de nuestra madre divina kundalini en la superdinamica sexual, una vez que los hayamos comprendido previamente en la meditación. Esta es la didáctica de eliminación del Yo, que enseña el V.M. Samael Aun Weor para llegar al equilibrio entre Juan y Nicodemo. el ser, con el saber. Lo recomendable es leer los libros del avatara de acuario. Es la iniciación venusta el punto de equilibrio, donde los cuerpos de pecado son lavados de la mancha del pecado original, y perfumados (con el Don de entendimiento y la fragancia de la sinceridad), a condición de lograr disolver el ego, para que por consiguiente, Juan el verbo, la palabra, revestida de cuerpos gloriosos, se haga clara y luminosa.

Nicodemo redimido con la dialéctica de Jesús, voltea hacía él y lo sigue atentamente en equilibrio con Juan.
Nicodemo redimido con la dialéctica de Jesús, voltea hacía él y lo sigue atentamente en equilibrio con Juan.

Juan 3

Jesús, Nicodemo y Juan

 

3  Había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, un principal entre los judíos. 2 Este vino a Jesús de noche (en la noche obscura del alma), y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro (Aquí la incredulidad de Nicodemo: ¡como cualquier maestro, que hace señales y prodigios!, no como dialéctica y didáctica de liberación); porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él (muchos seguimos personas, solo por las experiencias que cuentan, por los milagros que hacen o porque se dicen maestros). 3 Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo (aún crea en los maestros), no puede ver el reino de Dios. 4 Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre (zodiacal) de su madre (divina) y nacer? 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua (ens seminis) y del Espíritu (gnóstico de libertad interior), no puede entrar en el reino de Dios (no necesitamos conocimiento intelectual, tanto como regenerarnos espiritualmente por medio de la dinámica sexual, disolución del ego y sacrificio por la humanidad). 6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del espíritu (los cuerpos solares), espíritu es. 7 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo. 8 El viento sopla de donde quiere (con la palabra, el verbo de Dios), y oyes su sonido (la corriente del sonido, Juan, el ejército de la voz, difundiendo el evangelio gnóstico de liberación); más ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu (Jesús envío sus apostoles solamente con su capa, su alforja y sus sandalías). 9 Respondió Nicodemo y le dijo: ¿Cómo puede hacerse esto? 10 Respondió Jesús y le dijo: ¿Eres tú maestro de Israel, y no sabes esto? (¡el miedo surge de la ignorancia del "amor de Dios" y es contrario a la fe gnóstica!, ¡qué cuando damos desinteresadamente, y sacrificamos mediante la comprensión el dolor, nos llenamos de la gracia de Dios, su "Don" de entendimiento!) 11 De cierto, de cierto te digo, que lo que sabemos hablamos (del amor de Dios), y lo que hemos visto (de la sabiduría oculta), testificamos; y no recibís nuestro testimonio (por que la gnósis hay que vivirla en la escuela de la vida, en el gimnasio psicologico, para poder comprenderla). 12 Si os he dicho cosas terrenales (en donde estas atrapado, en el mundo de los sentidos), y no creéis (porque no ves hacía adentro), ¿cómo creeréis si os dijere las celestiales (lo que esta más allá de la iniciación venusta)? 13 Nadie subió al cielo (estando el ego tan vivo), sino el que descendió del cielo (Juan, el ejercito de la voz). El Hijo del Hombre, que está en el cielo (Chokmah, el Cristo Cósmico), acá abajo no debemos seguir personas, aún cuando sean (Nicodemo: "el principal entre muchos"), y aún un auténtico maestro gnóstico, lo único que puede hacer por nosotros es entregarnos el saber, el cuerpo de cristo (la doctrina gnóstica, pero cada uno debe practicarla personalmente, hasta lograr la resurrección de su maestro secreto). Por eso se dice: "Este es mi cuerpo, recibelo para tu salvación".

 

Practiqemos "La Revolución de la Dialéctica" que enseña el V.M. Samael en sus libros, para que podamos despertar y marchemos por el camino recto, el camino equilibrado entre el ser y el saber, siguiendo al maestro interior. 14 y, como Moisés levantó la serpiente (la "Madre" Divina Kundalini) en el desierto (de la iniciación, con la ayuda de su mujer, María Magdalena), así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado (del sepulcro con cuerpos gloriosos), 15 para que todo aquel que en él cree (en Samael, en su dialéctica y en su didáctica gnóstica de liberación), no se pierda (siguiendo Nicodemos y pueda marchar por el camino recto), más tenga vida eterna (una vez cristalizados los cuerpos solares, el famoso sahú egipcio).

 

24 «Así pues, todo el que oiga estas palabras mías (de Juan, la estrella de la mañana) y las ponga en práctica, será como el hombre prudente que edificó su casa sobre la roca (la sexualidad sagrada): 25 cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos (del Karma) y embistieron contra aquella casa (aquel santuario); pero ella no cayó, porque estaba cimentada sobre la roca (La doctrina de Pedro). 26 Y todo el que oiga estas palabras mías y no las ponga en práctica, será como el hombre insensato (Nicodemos) que edificó su casa sobre la arena (de teorías ortodoxas): 27 cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos, irrumpieron contra aquella casa y cayó (fulminada por el rayo de la Justica), y fue grande su ruina (por que el fornicario y el adultero, no alcanzan la iniciación venusta).» Mateo 7:24-27

Nicodemos: “¿Por qué miras la paja en el ojo de tu hermano y no ves la viga que está en el tuyo?, ¿cómo puedes decir a tu hermano: “hermano, deja que te saque la paja de tu ojo”, tú que no ves (hacía adentro) la viga que tienes en el tuyo)? ¡Hipócrita!, saca primero la viga de tu ojo (desintegra los yoes), y entonces verás claro (con consciencia objetiva) para sacar la paja (las dudas y los errores) del ojo de tu hermano (que solicita tu ayuda)”. Lucas 6, 41-42

 

El cuerpo iluminado de Jesús interroga al espectador. ¿Somos sensibles a esta enseñanza que Cristo transmite en el evangelio hecho pintura por el artista? o ¿simplemente asistimos pasivos a una celebración?

MISTERIO DE LA EUCARISTIA

Eucaristia
Eucaristia
"Por este tu sacramento conserva mi corazón sin macula, para que pueda muchas veces con limpia y alegre conciencia celebrar tus misterios, y recibirlos para mi perpetua salud; los cuales ordenaste y estableciste, señor, principalmente para honra tuya, y memoria continua de tu pasión. Alegrate alma mía, y dad gracias a Dios, por tan noble don y tan singular refrigerio; como te fue dejado en este valle de lagrimas. Porqué, cuantas veces te acuerdas de este misterio, y recibes el cuerpo de Cristo, tantas representas la obra de tú redención, y te haces participe de todos los merecimientos de Jesucristo, porque la caridad de Cristo nunca se apoca, y la grandeza de su misericordia nunca se gasta. Por eso te debes disponer siempre a esto, con nueva devoción de anima, y pensar con atenta consideración este gran misterio de salud, y así te debe parecer tan grande, tan nuevo y alegre, cuando celebras u oyes misa (la santa unción, encierra los misterios de la cristificación) , como si fuese el mismo día en que Cristo descendio, y se hizo hombre en el vientre de la Virgen, o aquel que puesto en la cruz padeció y murió por la salud de los hombres". Imitación de Cristo. Tomás de Kempis