Gnósis y ecumenismo

"Si se aman los unos a los otros, todo el mundo se dará cuenta de que son discípulos míos". Juan 13:35

 

"Axiomáticamente podemos afirmar que sobre la piedra de la caridad se levantará la nueva era. La persecución religiosa es falta de caridad; la intolerancia religiosa es falta de caridad; los celos religiosos son falta de caridad; DIOS ES AMOR Y CARIDAD. La historia Universal ha demostrado que la verdad no se puede monopolizar.

 

El predominio mundial de una sola religión resulta imposible. Todas las religiones son perlas preciosas engarzadas en el hilo de oro de la divinidad.

 

Las CINCO MIL religiones que actualmente existen en el mundo, hacen imposible el predominio de una sola religión.

 

Los hechos prueban que la verdad no se puede monopolizar. Tenemos que aceptar los hechos y rendirnos ante la evidencia; no podemos nadar contra la corriente: HECHOS SON HECHOS.

 

Las luchas religiosas resultan ahora extemporáneas, hay que cambiar el sistema de competencia religiosa por el sistema de cooperación humana.

La competencia es egocentrica, el ecumenismo es Cristocentrico.
La competencia es egocentrica, el ecumenismo es Cristocentrico.

El principio substancial de cooperación humana, es el fundamento de la auténtica CARIDAD CRISTIANA.

 

En el curso de la historia que nos ha precedido, nuestro planeta Tierra fue asolado muchas veces por sangrientas luchas religiosas: ANTES DE JESUCRISTO, en tiempos de David y Abraham y después de Jesucristo, por la "santa inquisición". Ahora todas las religiones necesitan reconciliarse para iniciar una nueva Era.


Caridad. Cuando criticamos la religión de otros pecamos contra la Caridad Cristiana; cuando perseguimos a otras religiones pecamos contra la Caridad Cristiana, cuando queremos que otros adopten a la fuerza nuestra religión y nuestras creencias particulares, pecamos contra la Caridad Cristiana.


Toda forma de violencia es un delito, contra la Caridad Cristiana; toda forma de coacción religiosa contra la mente humana es violencia, toda forma de violencia es falta de Caridad.

 

La religión que en estos instantes predique la herejía de la separatividad, quedará aislada y perecerá, inevitablemente.

 

Ha llegado la hora de revisar nuestros valores morales. Ninguna religión es absoluta.

 

Si alguna religión, escuela, secta u orden, fuera única y absoluta, solo existiría ella en el mundo. No existiría ninguna otra.

 

La existencia de CINCO MIL RELIGIONES está demostrando hasta la evidencia, que ninguna religión puede ser absoluta.


Solo la unión de todos los Credos, Escuelas y Sectas, o por lo menos el respeto a todas ellas, podrá detener la avalancha brutalizadora del ateísmo Marxista (materialismo ateo)".


La unión de todas las religiones y escuelas, sólo es posible mediante un Organo Central, imparcial, neutral, desprovisto absolutamente de todo sectarismo. La unión de todas las religiones y credos en un Ejército Poderoso, invencible. Es el Ejército de Salvación.

 

Ni las bombas atómicas, ni los cañones, podrán salvarnos del Ateísmo Marxista y de la avalancha arrolladora y brutalizante del "Comunismo". Carlos Marx, dijo: "Las religiones son el opio de los pueblos".

 

Si las religiones quieren sobrevivir al arrollador avance del Materialismo Comunista, deben unirse inmediatamente para organizar el "EJERCITO DE SALVACION MUNDIAL". El orgullo religioso, la intolerancia y la no cooperación con todos los otros credos, escuelas y sectas, significa muerte inevitable de toda religión en estos instantes de peligro comunista (materialismo ateo). Todo reino dividido será destruido, si las religiones no se unen serán destruidas.

 

V.M. Samael Aun Weor

 

Nota: Ello significa que con el desarrollo de los acontecimientos mundiales, la libertad de conciencia se encuentra en grave peligro.

 

 

LA LUZ DEL MUNDO

 

14 Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre  un monte no se puede esconder.

 15 Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa.

16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y los guien a glorificar a vuestro Padre que está en los cielos. 

 

Hoy vemos con beneplácito, como el sermón de la montaña ha echo eco en las consciencias de almas sedientas y hambrientas de Justicia,  con la unión de diferentes religiones, creencias, filosofías, escuelas, grupos altruistas, lideres, etc. en armónica convivencia para el estudio, práctica y difusión de valores universales. En la Ciudad de Monterrey, Nuevo León, México. El "Encuentro mundial de Valores" se celebra cada año, con la participación de destacados filántropos, luchadores sociales, humildes apóstoles de la humanidad, promotores lideres del bienestar social y en diversas ramas y disciplinas del saber; con ejemplos de vida que siembran esperanzas, compartiendo sus experiencias, vivencias, dificultades y logros. En un foro de talla internacional, armónico, desprovisto absolutamente de todo sectarismo, constituido por civiles amantes de la paz, que contribuyen ha hacer comprensible el sentido y el propósito de todas las religiones, escuelas, grupos altruistas incluido el objetivo del servicio público, etc. Dando cumplimiento a la mejor didáctica que existe para el aprendizaje, "el ejemplo", se aprende más con el ejemplo que con los preceptos. "Hechos son hechos", "Bienaventurados", dijo el gran kabir Jesús. Recordemos el sermón del Monte.

 

Las Bienaventuranzas:

  • Bienaventurados los mansos: porque ellos poseerán la tierra.
  • Bienaventurados los que lloran: porque Dios los consolará.
  • Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia: porque ellos serán saciados.
  • Bienaventurados los pobres en el espíritu: porque de ellos es el reino de los cielos (de los que se han empobrecido en el espiritu de servicio, compartiendo lo que poseen).
  • Bienaventurados los misericordiosos: porque ellos obtendrán misericordia.
  • Bienaventurados los puros de corazón: porque ellos verán a Dios.
  • Bienaventurados los pacificadores: porque ellos serán llamados hijos de Dios.
  • Bienaventurados los que sufren persecución por [causa de] la justicia, pues de ellos es el reino de los cielos.